Aroma melancolía

Caminar pisando las hojas secas del otoño
Manos en los bolsillos y ojos prestos
A la maravilla del mundo y su presencia
No hay más motivo para estar presente
No hay más razones para vivir,  no menos.
Un ave pasa y unos niños juegan a lo lejos;
La tarde se va pintando de un dorado azul
-ese color que me persigue de infinito -
Y yo voy por aquí, tranquilo, recordando.
Tantos lugares rondan mis pisadas
Y de pronto no sé si estoy aquí o alli.
De pronto tengo la completa certeza
De estar donde tu estás, justo allí.
Ya sabía yo que este aroma era ese triste,
Ese conocido aroma de la melancolía.

Jorge Arturo Ortiz

Comentários

Postagens mais visitadas