Instantes

Si pasa el tiempo, como suele pasar,
Hasta dejarnos heridos por la soledad,
Hasta quitarnos el corazón palpitante
En un día cualquiera, en una madrugada,
Y no puedo arrancar ya de mis labios
El sabor húmedo y dulce de tu boca,
Entonces esa será otra forma de morir
Sin partida, ni olvido, ni regreso.
Yo te miré a los ojos con firmeza
Y te dije que la vida eran instantes,
Mas, seguiste creyendo que los días
retornan de una extraña forma a ti,
Como no sea a través de la memoria.
Debo advertirte que está herida dulce
Que dejaste en mi boca como azogu
me llega hasta el mismo corazón,
Y que hoy, un poco más hoy que ayer,
Siento rondar la ternura de tu piel
Así, como marchándose veloz y muda,
Como parten los barcos en la niebla,
Y son tus besos trenes melancólicos
Que dejan mi estación vacía y triste,
Tan triste como un asiento en una calle,
En una ciudad perdida en este mundo,
Como si un beso más fuera la muerte,
Como si un beso más fuera la vida,
Como si un beso más,  desesperado,
Quisiera nacer, imposible, de mi boca,
Para luego caer y caer y derrumbarse,
Alondra enmudecida que ya no cantará:
Su aleteo final es el adiós de la partida,
Que así es la vida: besos, dolores, risas:
Misterios que conforman un instante.

Jorge Arturo Ortiz©